Lo mejor está por venir

Lo mejor está por venir

Por: Jenny Mejías.

Es difícil imaginar un desierto alegre, un terreno árido y seco floreciendo es imposible. El solo hecho de oír hablar de desierto es sinónimo de tristeza, soledad, escasez y sequedad. ¿Cómo alegrarnos en un ligar así? Por eso siempre relacionamos la hostilidad de un desierto con la dureza que suelen ser muchas de las circunstancias que vivimos ¿Cómo siente usted su vida hoy? ¿Sus finanzas? ¿Sus relaciones? ¿Su salud, trabajo, familia? ¿Está disfrutando de su vida?

Dios nos recuerda que aunque estemos atravesando la mayor dificultad de nuestra vida, nosotros, sus hijos amados no debemos olvidar sus promesas. No demos paso a la derrota, aun cuando nos falten fuerzas para sostenernos debemos, confiar que el tiempo de la bendición está más cerca de lo que podamos imaginar. No se desaliente y sea de bendición para todo aquel que vea su reacción frente a la adversidad. Honre a Dios y alábelo en medio de la sequía, en medio de su desierto.

Si usted cree, entonces lo verá la gloria de Dios manifestada en su vida y en la de los suyos.

Todo cambia y se vuelve para bien cuando la presencia de Dios está con nosotros. Por más que haya dificultades y problemas difíciles de resolver, y aunque aparentemente parezca que no se fueran a resolver, usted debe confiar en su Padre Celestial. Sólo debe caminar por la senda correcta.

“Confía en Jehová, y haz el bien; y habitarás en la tierra, y te apacentarás de la verdad. Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón. Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará”. Salmo 37:3-5