PALABRA DE LA SEMANA
Conviene que yo declare las señales y milagros que el Dios Altísimo ha hecho conmigo «Daniel 4:2»

Un amor verdadero

Reflexión renovadora que cambiará por completo tu forma de ver la vida. Haciendo de ti no sólo una mejor persona y un mejor ciudadano, sino un verdadero creyente, fiel a Dios, a sus principios y a su Santa Palabra.

Un amor verdadero

Por: Jenny Mejías.

 

“Mejores son dos que uno; porque tienen mejor paga de su trabajo.
Porque si cayeren, el uno levantará a su compañero; pero ¡ay del que está solo! que cuando cayere, no habrá quien lo levante. También si dos durmieren juntos, se calentarán mutuamente; más ¿cómo se calentará uno solo? Y si alguno prevaleciere contra uno, dos le resistirán; y cordón de tres dobleces no se rompe pronto”. Eclesiastés 4:9-12

 

Hay tres palabras en griego para definir, la que en español usamos como una: amor. Veremos cada una de ellas:

Amor Eros:

Gn.1:28-31 Dios creó todas las partes del cuerpo buenas… no solamente para la procreación, sino para el mutuo placer. La palabra conocer en Génesis 2:25, 4:1 habla de conocerse sexualmente. Un conocimiento sagrado, íntimo, creado por Dios para mutuo gozo y bendición. La mejor canción de Salomón: 8 capítulos que nos hablan de la relación de amor entre dos esposos

Amor fileos: 

Es un amor puro sin componentes eróticos, es querer con vehemencia, cariño entrañable es el tipo de amor que se tiene a los amigos, inquebrantable lealtad. Proverbios 17:17 

Amor Ágape: 1 Co. 13:4-8

Puedo amar con un amor ágape, sólo si primeramente tengo a Cristo en mi corazón y dejo que Él manifieste a través de mí, el verdadero amor, el de Él.

Un amor sufrido: ¿Cuánto estás dispuesta a sufrir por amor? En el transcurso del tiempo… lo experimentarás… un amor que ha sufrido… es un amor más fuerte. Tiene paciencia hacia los que lo ofenden. ¿Estás dispuesto a esperar y pasar por alto las imperfecciones?

Un amor benigno: Un amor que busca siempre actuar en bondad, que se manifiesta en bondad para con el otro. 

Un amor que no tiene envidias: Su triunfo… es tu triunfo… porque le amo. Lo mejor para él será lo mejor para ti. Nunca compitas con tu esposo.

Un amor humilde: No es jactancioso ni se envanece. No actúa con orgullo, ni soberbia, ni arrogancia.

Un amor que no hace nada indebido: El amor que actúa de una forma que agrada al Señor, en todo aspecto. No hace nada que desagradaría a Dios.

 Un amor que no busca lo suyo: Un amor que no trata de satisfacer sus propios deseos. Busca servir. Y no ser servido. Busca el bienestar del otro por sobre mi bienestar. Un amor dispuesto al servicio. Tus acciones, en respaldo a tus palabras, serán la evidencia de tu amor. No espera nada a cambio porque la recompensa viene de Dios.

Un amor que no se irrita: Un amor que sea apacible, que intente no explotar en furor, sino que sea amable.

Un amor que no guarda rencor: que elige perdonar, elige no recordar las ofensas del pasado. Un amor que cubre multitud de pecados.

Un amor que se goza en la verdad no en la injusticia: Un amor sin dobleces, real y transparente, que siempre busca la verdad.

Un amor que todo lo soporta, todo lo cree: El amor permanece firme bajo el sufrimiento y las dificultades sin ceder… no juzga las intenciones del corazón y cree en el otro.

Un amor que todo lo espera: Aun cuando parece que nada marcha bien, el amor espera el cumplimiento del plan de Dios y anticipa lo mejor. El amor deja al cuidado de Dios a tu esposo y espera en que El haga su voluntad en su vida.

Un amor que no deja de ser:

"El amor que puede soportar las tempestades más firmes, un amor que se mantenga como un ancla en medio de un mar tormentoso, es aquel que ha sido arraigado y cimentado en Él". Jeremías 31:3