PALABRA DE LA SEMANA
Conviene que yo declare las señales y milagros que el Dios Altísimo ha hecho conmigo «Daniel 4:2»

Transformados por medio de las tribulaciones

Reflexión renovadora que cambiará por completo tu forma de ver la vida. Haciendo de ti no sólo una mejor persona y un mejor ciudadano, sino un verdadero creyente, fiel a Dios, a sus principios y a su Santa Palabra.

Transformados por medio de las tribulaciones

Por: Jenny Mejías.

 

Dios tiene un propósito detrás de cada problema que afrontamos en la vida. El usa las circunstancias para formar nuestro carácter. De hecho, es a través de las circunstancias que Dios se vale para trillarnos, mucho más que en la lectura de las Escrituras. La razón es obvia: nos enfrentamos con las circunstancias veinticuatro horas al día.

 Jesús nos advirtió que tendríamos aflicción en el mundo. Nadie es inmune al dolor o está totalmente aislado del sufrimiento, y nadie se pasa la vida experimentar situaciones dolorosas y adversas que no quisiéramos vivir. Y seguramente cada vez que se resuelve un problema, otro está esperando para tomar lugar. No todos los problemas son grandes, pero todos son importantes en el proceso de crecimiento que Dios tiene para cada uno de sus hijos. 

El hombre que tiene el corazón quebrantado, dice la palabra que Dios en el Salmo 51:17 que “…al corazón contrito y humillado no despreciarás tú, oh Dios”. Sus experiencias más profundas y más íntimas de adoración probablemente ocurrirán en sus días más negros, cuando su corazón está quebrantado, cuando se siente abandonado, cuando ya no tiene opciones, cuando el dolor es grande, y se vuelve únicamente para clamar a Dios. Es durante el sufrimiento que aprendemos a orar nuestras oraciones más auténticas, más sentidas y más sinceras. En el sufrimiento aprendemos cosas acerca de Dios que no podemos aprender de otra manera.

Dios pudo haber evitado que José fuera metido en la cárcel, Él pudo haber evitado que Daniel fuera metido en la fosa de leones, Él pudo haber evitado que Jeremías fuera tirado en un pozo lodoso, Él pudo haber evitado que Pablo naufragara tres veces, y Él pudo haber evitado que los tres jóvenes hebreos fueran lanzados en el horno de fuego, pero no lo hizo. El dejó que estos problemas ocurrieran, y como resultado cada una de estos hombres de Dios se convirtieron en ejemplos de fe y obediencia.

Los problemas nos forzan a poner los ojos en Dios y a depender de Él en lugar de nosotros mismos. Pablo testificó sobre este beneficio: "Nos sentimos sentenciados a muerte y vimos qué débiles que éramos para escaparnos; pero eso fue bueno, porque entonces pusimos todo en las manos de Dios, el único que podía salvarnos." Nunca sabrá que Dios es todo lo que necesita hasta que Dios sea todo lo que le queda.

No importa cuál sea la causa, ningún problema pudo haber ocurrido sin el permiso de Dios. Todo lo que le pasa a un hijo de Dios es filtrado por el Padre y su intención es usar eso para bien aún cuando Satanás y otros lo quieren para mal.

Porque Dios está soberanamente en control, los accidentes son sólo incidentes en el buen plan de Dios para usted. Debido a que cada día de su vida fue escrito en el calendario de Dios antes de que naciera, todo lo que le ocurre tiene importancia espiritual. ¡Todo!

 “Sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”. Romanos 8:28.